Michael McCracken plantea 6 posibles aplicaciones de la geoingeniería para disminuir los efectos del calentamiento global, los cuales son:
- Construir y mantener activo un reflector solar (o varios pequeños reflectores) en una órbita sincrónica con la órbita de la tierra al redero del sol.
- La colocación de espejos o partículas en órbita cerna a la tierra
- La
inyección de aerosol o partículas especialmente diseñadas en la estratosfera para reflejar la radiación solar.
- Iluminar el
cielo claro y/o regiones nubladas en la troposfera para que mas radiación solar
sea reflejada de vuelta al espacio
- La
alteración de la cantidad de compuestos refractantes en la estratosfera ya sea
mediante el aumento de la cantidad de aerosoles que refleja (por ejemplo,
sulfatos) o la reducción de la cantidad de material absorbente (por ejemplo,
negro de carbono)
- La
fertilización de los mares.
Científicos, Investigadores"Nuestro sesgo filosófico era demostrar que este tipo de proyectos no iba a funcionar, pero cada simulación que hicimos nos demostró que sí funcionaría (...) me convertí en un reacio defensor de, por lo menos, seguir investigando".
Dr. Ken Caldeira El principal causante o aquel que más afecta el
calentamiento global es el dióxido de carbono, por lo cual este gas es uno de
los principales y claros objetivos de la geoingeniería, esta busca disminuir le
presencia de Dióxido de Carbono en el aire.
Por ejemplo se plantea la posibilidad de crear campos de plantas que absorban toneladas de dióxido de carbono y que al morir sean llevadas a un abismo marino, también se ha estudiado la posibilidad de comprimir el aire para extraer el co2 sobrante y enterrarlo en la tierra, este último es practicado desde junio del año 2000 en la ciudad canadiense de weyburn. |
Geo-IngenierosLos geo-ingenieros pueden ayudar a los
gobiernos a hacer frente al cambio climático a través de la manipulación de los
sistemas planetarios.
Hay que
tener claro que se debe generar una responsabilidad social y disminuir
considerablemente la producción de Dióxido de Carbono en la capitales del mundo, si empezamos
por cambiar nuestros métodos o hábitos de vida
se nos hará mucho más fácil mitigar el cambio climático y controlarlo
será menos complicado y no será en vano.
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"Al terminar este siglo, en la mayor parte de las zonas tropicales la temperatura veraniega será generalmente mayor que la más alta en los registros (...) Es por esta razón, que deberíamos intentar proyectos de geoingeniería, y que necesitamos estar preparados cuando políticos y naciones desesperadas busquen caminos rápidos para mejorar el clima".
Ken Caldeira
Una forma que la geoingeniería tiene para lograr baja la temperatura global es inyectar en la estratosfera un montón de pequeñas partículas, emulando el efecto del enfriamiento global provocado por una gran erupción volcánica como la que cubrió en lava y cenizas las Islas Filipinas en 1991. La erupción del Monte Pinatubo lanzó 20 millones de toneladas de Dióxido de Azufre, dejando una gran cantidad de pequeñas partículas flotando en el cielo. Estas partículas quedaron suspendidas en la atmósfera, lo que provocó un aumento en el rebote de la luz solar hacia el espacio, estimulando la reducción de la temperatura a nivel global en cerca de un grado Fahrenheit durante los años siguientes.
Con cada nuevo hallazgo parecía que la geoingeniería solar era una opción factible y menos peligrosa para, al menos, limitar el aumento de las temperaturas causado por la concentración de dióxido de carbono en el aire.
Este tipo de geoingeniería podría llegar a desarrollarse con 5 mil millones de dólares al año, siempre y cuando se use una flota de aviones como mecanismo de entrega de las partículas.
“La geoingeniería solar podría ser un método económico para frenar el calentamiento global”. Otros científicos, compañeros de Caldeira han descrito científicamente a la geoingeniería como una "una mala idea". Advierten que la geoingeniería podría tener consecuencias impredecibles y desastrosas para los sistemas climáticos de la Tierra y los suministros de alimentos |
Hoy en día los científicos consideran que la difusión de partículas de sulfato en la estratosfera (sin ningún tipo de mercurio u otros materiales tóxicos que los volcanes también suelen liberar) ya sea mediante el uso de una flota de aviones, globos gigantes o incluso artillería, puede ser la mejor forma de geoingenierización. Dado que las partículas permanecen en el aire por un tiempo limitado, el proceso tendría que hacerse de manera regular, incluso anualmente.
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